Al pie del Tabernáculo
--> 1 – El Rosal Palma de Mallorca. Agosto 12 de 1983. El día es gris y monótono. El ambiente luce tranquilo y rutinario. Nada parece indicar grandes cambios. Sin embargo, algo está sucediendo y muy pocas personas lo perciben. Ocurre algo más allá de la razón humana. Sentado en un viejo banco de piedra del convento, Fray Fernando Ridruejo contempla tristemente su rosal favorito. Hace semanas que no ve en él más que pequeños brotes rojizos y eso, además de impacientarlo, lo preocupa. Sabe que no es normal. Cualquiera se daría cuenta de eso, sin darle demasiada importancia. Debió florecer al iniciarse la primavera. Algo está mal. Demasiado mal. Y supera los límites de la naturaleza. Los retoños le recuerdan a las vocaciones sacerdotales que debe resguardar y a sus peores pesadillas. Resulta irónico, pero son menos abundantes sus aspirantes, que los capullos del rosal, y éstos, así mismo, representan una cantidad mínima en comparación a sus malos...