Libro 2 - Al Pie del Tabernáculo
24 - SECTAS
-¡Clarisita! ¡¿Por qué tardaste tanto?!
-Lo siento mamá, tuve que hablar con Fray Fernando, eso me demoró.
-¡Y, ¿todos esos instrumentos?!
-Decidí mimar un poco a los seminaristas.
-¿Otra vez?
-¡Otra vez!
-Van a salir más músicos que curas, al paso que van...
-Yo no lo veo así... ¿A qué hora se marchan?
-Antes de que anochezca.
-Ajá... Estaré era la máquina, buscando algunos datos.
-De acuerdo, no te molestaré. - Clarisa subió serenamente las escaleras, e ingresó a su habitación.
-(“No hacía Comunión con ella, desde el último retiro que compartimos... Tengo que saber por qué se debilitó así... Aunque también es preocupante la cantidad de seminaristas que siguen desapareciendo sin dejar rastros... veamos... tal vez las leyendas den alguna pista... la Biblioteca de Rumania... «Los que nunca fueron derrotados llegaron a la categoría Suprema»... «Se díce que fueron sacerdotes, Obispos o seminaristas seducidos por vampiresas con un entrenamiento especial, a lo que sumaban espías que se infiltraban en el entorno de la víctima escogida»... Una versión más sofisticada, de la forma en que atraparon a Javier... «Mujeres de extrema belleza, cálidas y misteriosas, audaces y atrevidas, estudian cada punto débil del futuro nosferatus, minan sus sistemas de defensa, llevándolos a profundas crisis de fe»... Evidentemente, eso les lleva tiempo... «Una vez sembrada la duda, comienza la seducción indirecta, a través de violentas pesadillas eróticas»... Una combinación explosiva... «Las víctimas, por lo general, no saben a quién recurrir, omiten confesar sus deseos malsanos, y es allí donde caen por completo sus defensas»... Por eso hay cada vez menos curas, y más vampiros... Quizás, la clave para encontrar su escondite sea esa... vigilaré los conventos y seminarios para detectar a los espías, y así desbaratar la organización... Y también podré encontrar a Pam... Javier también fue capturado, ya debe estar muerto... pudo haberse evitado... pero no imaginé lo de Pam... Verificaré los domicilios de cada sede en la que haya habido desapariciones... Bien... hay mucho trabajo por delante, son más de cien en todo el país... pero la distancia, no es un problema grave... ¡Hhhh!... ¡Estoy cansada!... No me vendría mal una llamada de Richie...”) - sonó el celular - ¿Hola?
-¡Amor, ¿cómo estás?!
-¡Maravillosamente, ahora que te escucho!
-¡Se agradece el cumplido, muñeca!
-Por nada.
-¿Tienes algún plan?
-Pues... No... aunque, parece que Ronromeo quiere dar un paseo...
-Bueno, lo llevaremos con nosotros, ¿nos encontramos en el acantilado a medianoche?
-Bien, seré puntual, el Sweet Charity nos estará esperando.
-¡Excelente!
-¿Has notado algún cambio entre la gente que te rodea?
-No. ¿Por qué preguntas? ¿Estás celosa?
-No exactamente, sólo intento ser previsora.
-¿Presentimientos?
-Efectivamente. Estuve haciendo algunas investigaciones en la red... Cuídate de los estudiantes nuevos en la Universidad, profesores, celadoras, en fin, cualquier persona que no conozcas. Sobre todo, si son mujeres.
-(“¡Esto ya fastidia!”)Lo tendré en cuenta, preciosa.
-Mis padres vuelven a marcharse esta noche.
-¡Qué bien!
-Estaré sola dos meses, eso me facilitará las cacerías de vampiros...
-¿Ellos no corren peligro?
-Papá sabe como cuidarse, fue hijo de una Cazadora...
-¡Vaya! ¡Cada día se aprende algo nuevo!
-Cierto... ¿Tuviste encontronazos con la prensa?
-No, desde lo del gimnasio.
-Pronto veré la nota en las revistas...
-¿Sucede algo?
-Creo que tengo compañía... Papparazzis... están trepando por las enredaderas del jardín... Te llamaré más tarde.
-De acuerdo.
-Adiós. - Clarisa colgó y tomó un cepillo - (“Menos mal que mi padre, instaló un dispositivo en el teléfono para evitar que lo pinchen... Después de todo, tienen que ganarse el pan, así que, me asomaré a cepillarme el pelo y saludaré amablemente... será divertido y me evitaré una fama de hostil con los medios gráficos...”) - la muchacha hizo lo que tenía pensado: subió el volumen del parlante del portero visor - ¡Hola!... Cuidado, allí hay una piedra floja, se pueden caer... Por nada... (“Bueno, ya es suficiente... continuaré con mi entrenamiento en el sótano...”) ¡Ronromeo!... ¡ven acá, gatito!... ¿Quieres corregir mi rutina?
-«¡Miau!»
-¿Eso quiere decir «Sí»?
-«¡Miaurr!»
-¡De acuerdo! - tomó a su mascota, y bajó por el ascensor - Aquí estamos... Esta es mi bolsa de entrenamiento... y este, mi muñeco... Parece que no te gusta.
-«¡Grr!... ¡Fffffff!»
-¡Calma!... Quédate en las colchonetas... eso es...
-«¡Miaurrr!»
-Bien... Tú me corriges, ¿O. K.?
-«¡Prr! ¡Miau!» - el gatito clavó sus ojos azules en la silueta perfecta de su ama, que inició el calentamiento. Al cabo de treinta minutos, Clarisa se dispuso a elongar, cerca de su vigilante mascota...
-¡Ay!... Duele un poco...
-«¡Miau!»
-Sí, claro, continuaré...
-«¡Prrrrrrrrrr! ¡Prrrrrrr! ¡Prrrrrrrr!»
-¡Gracias! - el gato se acercó a la joven para jugar con su cinta negra.
-«¡Grrrrrrr! ¡Grrrrrrrrr!»
-¡Muy bien! Tú te diviertes y yo sufro... Suficiente, mi rutina no termina... contraer... ¡y comenzar a patear!... ¡Uno!... ¡Uno, dos!... ¡Uno, dos, tres!... ¡Hhh!... ¿Qué tal estuvo esa combinación?
-«¡Miu!»
-¡¿No te gustó?!
-«¡Mi!»
-Reconozco que caí algo desviada, en fin, lo intentaré de nuevo... ¡Uno!... ¡Uno, dos!.. ¡Uno, dos, tres!...
-«¡Prrrrrrrrr! ¡Miau!»
-¡Gracias!... intentaré algo más difícil... patada... salto con giro... y patada circular...
-«¡Miau!»
-¡Aquí voy!... ¡Uno!... ¡Dos, tres!
-«¡Prrrrrrrrrr! ¡Miaurrrrrrr!»
-¡¿Te gustó más que la anterior?!
-«¡Prrrrrrrrrr!»
-¡Ya veo!... - Clarisa continuó con su entrenamiento dos horas más, esta vez, con formas para danes - ¿Estuvo bien?
-«¡Miu!»
-¿No?
-«¡Mi!»
-¡Oye, sólo fueron un par de centímetros!
-«¡Pfffffff!»
-¡Está bien!... Lo haré otra vez... ¡Vaya que eres exigente! – repitió la misma forma siete veces, hasta que Ronromeo estuvo satisfecho.
-«¡Prrrrrrrr! ¡Prrrrrrrrrr! ¡Miaurrrrrrr!»
-¡Por fin!... ¡Estoy muerta!
-«¡Prrrrrrrr! ¡Prrrrrrrrrr! ¡Miaurrrrrrr!»
-¡Necesitaré un buen baño!... ¡Estoy empapada!
-«¡Prrrrrrrrrr! ¡Prrrrrrrrrrrrr! ¡Prrrrrrrrrr!»
-¿Quieres mimos?
-«¡Prrrrrrrr! ¡Prrrrr!» - la niña se dejó caer en el Tatami y jugó unos minutos con su mascota, seguidamente, regresó a su cuarto a preparar su baño y su vestuario.
-¡Hhhh!... Bien... ¡No veas! ¡Eres macho! - le arrojó al gatito una toalla en la cabeza que, obviamente, lo cubrió por completo - ¡Te ves gracioso!
-«¡Miau! Miau! ¡Miau!»
-¡Ya, ya! ¡No es para tanto! (“¡Eres decididamente fuera de lo común!... me criticas el entrenamiento, más que mi propio Sabón Nin... ¡Pero no dejas de ser un hermoso gatito Siamés!... Por otro lado, me inquieta la situación de Richie... Está algo indefenso... El Supremo ya debe saber que él es mi punto más vulnerable... Deberé confiar más en la influencia de los lazos afectivos que me unen a él... y a Pamela...”) - terminó de bañarse, y se cercioró de que no la estuvieran espiando, tomó el celular y marcó el número de Ricardo.
-¿Hola?
-¿Richie?
-¡Preciosa, por fin! ¡Creí que no llamarías!
-Nos interrumpieron, era justo que termináramos nuestra charla.
-Tienes razón... ¿Qué estás haciendo?
-Acabo de bañarme.
-¿Estás en bata?
-No. Con la toalla puesta.
-¡Muy interesante!
-¿Tú crees?
-¡Por supuesto!
-¡Gracias!
-Por nada... ¡Es una pena perderme semejante espectáculo!
-¡Exageras!
-Claro que no... ¡Muero por verte desnuda!
-¡Ya! ¡Suficiente!
-¡Me encantas!... Eres preciosa... De pies a cabeza... No puedo actuar como un hipócrita al respecto... ¡Te amo!
-¡Ya lo sé!
-¡Y te deseo también, preciosa, de veras!
-Richie... estás pareciéndote a alguien que no quiero recordar...
-¡Lo siento! No quise herirte, pero tenía que decírtelo.
-¡Te comprendo!... Eres humano...
-No se te oye bien, ¿qué te sucede?
-Algo no está bien, y quiero averiguar qué es... No me dices todo lo que sabes.
-Estuve hablando con Javier hace un rato. Me dijo muchas cosas a cerca de ti... (“¡A ver, ¿qué respondes ahora?!”)
-Richie... Javier está muerto.
-¡No puede ser!
-Es uno de ellos, ¡tenemos que encontrarlo! ¡Dime dónde lo viste!
-Fui a visitarlo a su departamento... (“Le diré la verdad, no podrá seguir mintiendo.”)
-¡Fuiste a caer en la boca del lobo! La situación es peor de lo que imaginé... No te acerques a él de nuevo, ya estás demasiado expuesto, no quiero que corras ningún riesgo, ¿de acuerdo?
-Está bien.
-¡Por favor cuídate! ¡Me importas demasiado! Ya perdí a mi mejor amiga, ¡no permitiré que a ti te suceda lo mismo!
-¡Ni lo menciones!... ¿Podemos vernos ahora?
-Si vienes para casa, no hay problema.
-¿Por dónde ingreso?
-Flor la calle de atrás. No tienes más que seguir las rosas.
-¡Cierto! ¿En una hora?
-¡En una hora!
-¡Bien! Ádiós.
-Adiós. - el muchacho cerró su teléfono celular y salió rumbo a la casa de Clarisa.
–(“¿Javier, muerto? ¿Vampirizado?... ¡Pamela! Sólo así puede explicarse... hasta el momento, no he querido creerle a Clarisa, pero esto me supera...”)
-Richie, ¿adónde vas? - preguntó la madre.
-A ver a Clarisa.
-Ten cuidado, los periodistas están por todas partes.
-Lo tendré... – besó a su madre, y subió a su coche – (“Aunque ahora que lo pienso, se veía extraño... llevaba gafas de sol... y todas las ventanas de su departamento estaban cerradas... no se enfadó cuando hablamos de Clarisa, mas bien diría que quería ayudarme a conquistarla... No parecía él mismo, su dormitorio estaba desordenado... se sorprendió al verme... cualquiera diría que no estaba listo para recibirme...”) - condujo a través de la ciudad, sin que nadie lo siguiera - (“Será conveniente que le cuente cada detalle a Clarisa, tal vez le sirva de ayuda... las rosas... debo seguir las rosas... ya estoy llegando... ¡Y Clarisa, aguardándome!... ¡Allí está!... De blanco, ¡como un ángel!”) - bajó de su vehículo, y corrió al encuentro de la bella Cazadora.
-¡Richie! - la abrazó con ternura, y la besó apasionadamente.
-Tenemos que hablar...
-Lo imagino... Ven, vamos a mi dormitorio, Está el Santísimo Expuesto, eso te ayudará a decir la verdad.
-De acuerdo. - lentamente, subieron las escaleras, y llegaron al lugar indicado.
-Bien. Te escucho. ¿Fuiste a ver a Javier?
-Se veía extraño... (“No puede engañarme ante algo tan sagrado...”)
-¿Qué tan extraño?
-Cansado... Ojeroso... Llevaba gafas de sol... y las ventanas cerradas en su habitación fueron lo que más me llamó la atención.
-Muy extraño... pero son síntomas corrientes... ¿de qué hablaron?
-De ti.
-¿De mí?
-Mucho... hizo muchas preguntas, y me dio muchas respuestas.
-¿De qué tipo?
-Sobre tus actividades... Artes marciales... Parecía conocerte más de lo que yo supuse.
-Sólo Pam pudo decirle tantas cosas...
-¿Hasta qué punto no influyen tus celos en todo esto? Pamela está bien, y con él.
-Richie... ¿No crees nada de lo que te conté?
-No te he visto matar vampiros... porque los vampiros no existen...
-Estás en un error... no tengo celos de Pamela, ella ya no es humana, tienes que creerme... Ya has visto muchas cosas que exceden todo razonamiento coherente... ¿qué otras cosas te dijo él?
-Me habló de una marca, debajo de tu pecho izquierdo.
-La Cruz... Es de nacimiento, según los escritos que leí de la página privada del Vaticano, me identifica como cazadora. Pam se lo dijo, sólo ella la vio desde que éramos pequeñas y nos bañábamos juntas...
-¿Segura?
-Segura. Nunca estuve con él, para poder cazar vampiros debo ser virgen.
-Decía que tienes un cuerpo perfecto, como una escultura.
-Me lo dijo muchas veces, por eso quiso que yo fuera su modelo, me negué.
-Su tono de voz era muy distinto, oscuro, como con un eco...
-Es un vampiro. Pero por lo que me cuentas, aún no está listo para salir a matar... No te atacó en ningún momento, ¿verdad?
-No... Se... sorprendió al verme, no sabía qué decirme al principio.
-Tu propio sentido de la justicia te llevó a adelantarte a los planes del enemigo.
-¿Qué piensas hacer?
-¡Lo que tenga que hacer!
-¡Es peligroso! ¡No lo hagas!
-No pueden dañarme, ni ellos, ni la policía. Sólo lo darán por desaparecido, además, no iré armada, ¡sabes que no me hace falta! Estaré bien, lo prometo.
-Clarisa... ¿Soy parte del plan para destruirte?
-Lamentablemente... sí.
-¡Dios! - el muchacho abrazó a Clarisa con fuerza. Temblaba... y lloraba con justas razones.
-Vamos a luchar juntos en esto... No hay que dejar a la vista la más mínima debilidad.
-¿Qué puedo hacer?
-Tengo una idea... - se acercó al oratorio, y de allí tomó una cajita dorada - Llévate esto, y no te separes de él, por nada del mundo. Es un rosario hecho con pétalos de rosas de Castilla, por el momento, servirá para que estés protegido. Cuando elimine a Javier, estarás casi fuera de peligro y yo estaré más cerca de Pam, y de la solución a todo este embrollo.
-«¡¿Cómo que estuvo contigo?!»
-«¡Me sorprendió, Mi Señora! ¡No creí que se atreviera!»
-«¡Imbécil! Ahora, tendré que enviarte una legión, y arriesgarla inútilmente... No estás preparado para salir al exterior, y yo he sido debilitada por el arma secreta de la Cazadora... Él es una espada de doble filo... vampirizarlo, requerirá de todas nuestras estrategias... Ahora vete... y procura que nadie se entere de tu paradero... aún tienes la ventaja del odio que generaste en la Cazadora, no querrá volver a verte por algún tiempo...»
-«Obedeceré, Mi Princesa.» - Javier se retiró de la presencia de Pam. Ella, encerrada en su cripta, se debatía entre confusos pensamientos y pesadillas recurrentes.
-(“«¡Me mordió!... ¡¡Me mordió el perro, mamá!!... ¿Cómo te llamas?... ¿Me llevarás con un doctor?... Clarisa, ¡mi mejor amiga!... Pasaremos la prueba de canto, ¡¡ya verás!!... ¡Oh, no digas eso! ¡Las dos tenemos el mismo talento!... ¡Javier es guapísimo, ¡dile que sí!!... ¡Ella no lo merece!... ¡¿Por qué no se fijó en mí?!... Apenas y deja que la bese... Se cree mejor que yo... ¡La destruiré y me quedaré con Javi!... ¡No quiero delatarla, ¡la matarán!!... pero ella me odia...»”)
-Realmente, Pamela te odia, ¡y fue tu mejor amiga!
-¡Qué contrasentido, ¿verdad?!... Es... parecido a un lavado de cerebro... como un proceso vertiginoso de reconversión de ideas... odian todo lo que amaron en su vida... Sacan a relucir todas sus frustraciones... hacen todo lo que no hubieran hecho jamás estando vivos... ¡imagina lo que pueden hacerle a un sacerdote!
-Tu peor pesadilla, ¿o me equivoco?
-¡¡No te equivocas!!... ¡Por Dios, mira la hora qué es!... ¡Tengo que ir a despedirme de mis padres! ¿Te quedas con Ronromeo unos minutos?
-¡Claro! No tardes.
-¡Descuida! - Clarisa le arrojó a Richie, un almohadón en la cabeza, antes de cerrar la puerta.
-¡Muy graciosa! ¡Muy graciosa!
-¡Jí, jí! - se escuchó detrás de la pared. La millonaria heredera bajó las escaleras, y se arregló el cabello frente al espejo del pasillo, pero... - ¡Hhhh! (“¡Oh, no!... ¡Están aquí!... ¡No son principiantes!... volver a subir, sería perder demasiado tiempo... Bien, en ese caso, lo mejor es una acción rápida y terminante...”) - se quitó los zapatos y se abalanzó sobre los vampiros, que casi atacan a sus padres...
-¡Ronromeo, ¿qué sucede?!
-«¡Grrrrrrrrr! ¡Pfffff!»- el pequeño gato saltó de entre los brazos de Richie, para enganchar su cuello en la correa de la Teca y saltar por la ventana...
-¡Dios bendiga a los gatos siameses! - exclamó Clarisa, al tiempo que aplicaba un fuerte puñetazo en el estómago de su rival. Ronromeo se le acercó y saltó sobre la cara del vampiro, transformándose en un león blanco. - ¡Wow! - los no vivientes huyeron despavoridos - ¡Ronromeo... ¿eres tú?! - la niña, más que sorprendida, se acercó al animal y lo acarició, mientras él le lamía la cara - ¡Hey! ¡Vas a poner celoso a Richie! - susurró, mirando de reojo a sus padres, que se reponían del susto; rápidamente puesta en pie, preguntó - ¿Están bien los dos?
-Sí, hijita, gracias... ¡Estuviste increíble!
-Viniendo de ti, ¡es un verdadero halago, papá! - lo abrazó.
-¡Oigan, yo también quiero de eso!
-¡Celosa! - exclamaron los dos, entre risas.
-¡Cuídate!
-¡Lo haré! ¡Adiós! - saludó finalmente. El avión particular, despegó por segunda vez hacia el Caribe - (“¡Ahí, van!... ¡Cielos!... Ronromeo... ¡Gatito lindo, eres todavía más especial, de lo que ni yo misma hubiese llegado a sospechar!... Ven acá... te cambiaré el nombre cuando te transformes: te llamaré Ariel, que significa «El León de Dios»...”) ¡Gracias, me salvaste la vida!... Ya volviste a ser tú...
-«¡Prrrrrrrrrrr! ¡Miau!»
-Trajiste la Teca en cuanto percibiste peligro... ¡Eres mi héroe!
-«¡Prrrrrrrr! ¡Prrrrrrrrrrr! ¡Prrrrrrrrrr! ¡Miaurrrrr!»
-Regresemos con Richie, debe estar preocupado.
-«¡Inútiles! ¡¡Pusilámines!! ¡¡Su ineptitud sobrepasa en mucho el límite de lo tolerable!!!... ¡¡Centinelas!!»
-«¡Señor!»
-«¡¡Llévenselos a la torre más alta del castillo!!» - los centinelas acataron la orden. Los vampiros que sobrevivieron a la cacería acababan de ser condenados a muerte...
-¿Todo está bien, preciosa?
-Comienzan a desesperarse... se puede decir, que están viniendo a buscarme... el entrenamiento es bueno, pero ellos ahora son más fuertes.
-¡Tienes a Ronromeo, ¿qué puede sucederte?!
-¡Es verdad!
-Ven, vamos a descansar un poco... Supe que Jordi se recupera en un convento.
-Sí, con los jesuitas.
-Me enteré de que su padre era uno de los invitados a la fiesta...
-Lo que indica que, por el momento, mis padres no sospechan nada.
-Pero... Jordi está enamorado de ti, ¿verdad?
-No.
-Las versiones corren...
-Sin fundamento.
-Te vieron con él...
-¡¿Vas a pasar una noche de insomnio, sólo porque me tomó de las manos en la Catedral?!
-¡¿Eso fue todo?!
-¡Eso fue todo!
-Además... a Jordi dejaron de interesarle las chicas.
-No comprendo.
-Le gustan, pero ya no le interesan... Quien verdaderamente le importa es Cristo... ¡Va a ser sacerdote!
-¡Cielos!... ¡Me dejas sin habla!
-El Obispo reaccionó igual. No es fácil que se den ese tipo de conversiones después de un exorcismo.
-Parece de película.
-Sólo que no he visto ninguna, en la que se haga el Ritual en la forma correcta.
-¿Te dedicarás a eso cuando derrotes a los vampiros?
-No lo he pensado. Puedo tardar años en vencerlos definitivamente...
-Al paso que vas, yo no diría eso.
-¡Gracias!
-¿Cómo quedó el arreglo del dormitorio de tu otra casa?
-Aún no está listo... Creo que tienen por delante varios días de trabajo... Pero podemos verlo desde aquí, si quieres... Encenderé el ordenador... Y enviaré un e- mail a la estación de policía, con la orden para que el circuito cerrado de TV, sea conectado a la red... ¡Ya!... vamos a hacer primero un recorrido por los exteriores... ¡Por Dios!... ¡Mira eso!... ¿Qué se supone que intentan hacer?
-Entierran algo.
-No son mis jardineros habituales... Tampoco son vampiros...
-¿Sospechas?
-Sí... El cementerio... ¿Alguna vez has visto una profanación de tumbas?
-No.
-Héla aquí... ¡En vivo y en directo!... Llamaré a Fray Fernando. - Clarisa, decidida, tomó el celular - ¿Hola?
-¡Clarisa, ¿cómo estás, hija?!
-Preocupada.
-¿Qué sucede?
-Hay una secta satánica en Mallorca.
-¿Cómo lo supiste?
-Me localizaron.
-¡Voy para allá!
-Estoy en Santa Clara de Asís.
-Bien.
-Nos vemos... Ya viene hacia aquí. - Clarisa se sentó sobre los almohadones, con la cara entre las manos - ¿De dónde habrán aparecido?
-Se han puesto de moda...
-Entonces, estarán en todos lados... ¡Hay mucho trabajo, y muy duro!... Volveré al ordenador...
-Aprovechan la ausencia de tus padres.
-Evidentemente... No pueden acercarse a mi cuarto... no lo encuentran... pero... tengo algo preparado, por si lo hacen.
-¿Qué es?
-¡Una trampa para ratas, tamaño gigante!
-¡¿Cómo?!
-Funciona de manera sencilla... Los deja entrar, pero no pueden salir.
-Con una puerta que sólo se abre por fuera...
-Algo así... Cuando todos estén dentro, automáticamente, haré sonar las alarmas.
-Pero, ¿de qué los acusarás?
-La Custodia es de oro y piedras preciosas, como los candelabros, la araña y las antorchas. A cualquiera se le despertaría la codicia, ¿no te parece?
-Supongo que sí.
-Bien... ¡Oh, vaya! ¡Comenzó la cacería!
-«¡Que comience de inmediato la búsqueda intensiva de la Cazadora!» - ordenó el Supremo - «¡La quiero viva! ¡No lo olviden! ¡La haré pedazos!... Su abuela no pudo contra nosotros... La venceremos del mismo modo, aislándola de todo aquello que ama, haciéndola sentirse sola, abandonada por su familia... ¡Y por su Dios!...»
-Tu padre, ¿te contó más a cerca de tu abuela?
-No demasiado. Sólo se limitó a decirme que sus poderes se comenzaron a debilitar cuando él nació... Jamás se supo por qué la maternidad afectó su misión, cuando por lógica, debió fortalecerla y completarla... hasta hoy.
-Tal vez este antiguo manuscrito, aclare tus dudas, Clarisa... - el anciano fraile acababa de ingresar al cuarto.
-¡Fray Fernando! - la niña lo abrazó.
-¡Pequeña!
-Ven, te presento a...
-Ya nos conocemos, Clarisa. - sonrió Richie - Fray Fernando Ridruejo es el confesor de mi abuelo.
-¡Oh, vaya! ¡Dios no da puntada, sin hilo!
-Nunca mejor dicho hija, ten...
-Son antiquísimos restos de pergamino... Están escritos en latín... griego... y castellano antiguo... con algunas frases en latín germánico... Llevará tiempo traducirlo... pero podemos escanearlo, para conservar mejor la información... ¡Un momento!... Hay más idiomas aquí... ¡Esto es increíble!... Son... ¡manuscritos!... ¡Dios mío!... ¡Estos documentos son incunables!... ¡¡Son parte de los antiguos rollos perdidos del Mar Muerto!! ¡Fray Fernando, ¿cómo...?!
-¡Menos pregunta Dios, y perdona!... ¿Qué hay de la secta?
-Está infiltrada en toda la ciudad... ¿Cuántas profanaciones de tumbas han habido en los últimos años?
-Algunas, pero todos los profanadores están ya en prisión.
-Mira esto...
-¡Dios Santo!
-Ritos afrocubanos y afrobrasileños...
-Esto no lo esperábamos... Tendremos muchos factores en contra.
-Cierto. La Iglesia no los considera una amenaza.
-Pero lo son.
-¿Qué podemos hacer?
-Intentaré algo. Tengo una idea.
-¡Cuéntanos, Richie!
-Graba todo lo que registren las cámaras, montaremos un estudio de televisión, en donde nadie pueda interrumpirnos...
-¡El sótano! - exclamó Clarisa - Si quitamos los aparatos de gimnasia, será lo suficientemente espacioso para nuestro propósito.
-¡Estupendo! - suspiró el fraile. Clarisa tecleó una clave en su máquina.
-Con eso basta...
-Clarisa.
-¿Fray Fernando?
-¿Crees que su blanco será el Santísimo?
-Es lo más probable...
-¿Alguna idea?
-Todo está resuelto. Podrás dormir tranquilo... Ya está... ¿Nos ponernos en camino a la ciudad? Para cuando lleguemos, la policía rodeará la casa.
-Bien. Clarisa, te veré a medianoche.
-¡No lo olvidaré! - un beso discreto, y la pareja se separó momentáneamente.
-Cada día me sorprendes más, pequeña.
-Me halagas, Fray Fernando.
-¿Cómo los atrapaste?
-Con un buen sistema de alarma... las cámaras registran los rostros desconocidos, y eso hace que la primera señal ponga sobre aviso a los perros, luego en mi dormitorio, la ratonera: al levantar la Custodia se traba automáticamente la puerta de acceso... el resto es fácil de deducir.
-¡Magnífico!
-¡¿Ves lo que te digo?!... Patrullas y camiones celulares... ¡Además de periodistas, claro!... ¡Hhhh! Ingresemos por la entrada del personal doméstico. – Clarisa, al volante de su Lamborghini, llegó a la casa de sus padres - Con permiso...
-¡Niña Clarisa! ¡Nadie sabe qué sucede! ¡Las alarmas se han vuelto locas! – exclamó el mayordomo.
-¡Calma, Sergi! Todo estará bien.
-¡Hay gente del servicio, encerrada en su dormitorio!
-Ya lo sé... a propósito, ¿quién los contrató?
-Su señor padre puso un aviso en el periódico y el jefe de personal hizo el resto...
-Envíalo a mi despacho, en cuanto se vaya la policía.
-Hay un pequeño inconveniente...
-¿Cuál?
-Él también quedó atrapado en su alcoba, mi niña.
-¡Cielos! (“¡Sabía yo, que este tío nos traería problemas!”)
-¿Repararán las alarmas?
-No están descompuestas... funcionaron en forma inmejorable... ¿Oficial?
-Señorita Suárez... Por favor, ¿me permite las llaves de su cuarto?
-Sí, claro, aquí están... Pero sólo yo puedo utilizarlas, el sistema se activa, si no reconoce mis huellas dactilares... ¡Vaya, vaya, vaya!... Señor Vilallonga, ¡qué gusto volver a verlo!... ¡Profanando el Santísimo Sacramento! ¡Y no precisamente por la Custodia de oro! ¡Usted y su secta diabólica burlaron la buena fe de mi padre, ¡pero no van a engañarme a mí!!
-¡No sé de qué habla! ¡Soy inocente!
-Las cámaras del circuito cerrado de TV probarán lo contrario. Todo está registrado... Pueden llevárselo, oficiales... mis valores están en su lugar, excepto el principal... La Hostia Consagrada que está escondida en la ropa interior del sospechoso... Fray Fernando tenga la amabilidad de registrarlo. - el fraile procedió.
-¡Aquí está, Clarisa!
-¡Lo sabía!... Bien, ahora sí pueden sacar de mi cuarto a esta lacra...
-Jamás imaginé que se atreverían a tanto.
-Es que los errores y los descuidos humanos, en cualquier circunstancia, se pagan caro, Fray Fernando.
-Lo sé... Voy a bendecir nuevamente la casa, eso reforzará las defensas.
-Bien pensado...
-(“A ver... Debo tener algún libro al respecto... Videos... Programas de televisión, tal vez allí puedan facilitarme el material que busco.”) - Richie, dispuesto a todo para ayudar a Clarisa, pasa su tiempo libre trabajando en su propio documental sobre sectas satánicas; bien pronto descubre que la situación es más crítica de lo que aparenta - (“Clarisa, una vez más, tenía razón... están en todas partes... Se lo toma como un entretenimiento de moda... Nadie se da cuenta del todo, de que juegan con la muerte de sus propias almas... Encontré algo... «Los efectos más visibles en la detección de este tipo de grupos pseudorreligiosos, son: cambios repentinos en la personalidad, depresión, autoritarismo, agresividad, miedo a los objetos religiosos, fobia a las iglesias...» ¡Dios mío!... ¡Eso es!... Clarisa llegó a insinuarlo... «hacen todo lo que jamás harían estando vivos... ¡imagina lo que podrían hacerle a un sacerdote!»... ¡Transformarlo en líder de una secta satánica!... Saldré de dudas, en un momento... todo es cuestión de indagar en la red, a qué se dedicaban estos pillos antes de ser lo que son...”) - en pocos segundos, sus sospechas se cristalizaron - (“¡Cielos!... Más del ochenta por ciento, fueron sacerdotes y religiosos!... «Los que fueron Obispos, realizan incluso sacrificios humanos, en sangrientos rituales»... ¡Vampiros!... Nada está fuera de contexto, todo guarda una perfecta relación... Eso puede ser una pista firme, para hallar a Pamela, fuera del alcance de Javier... Se lo diré a Clarisa...”) - miró el reloj - (“Ya es hora de que me cambie para ir a verla...”)
-En mi opinión, Clarisita, fuiste demasiado dura con esa gente. - comentaba durante la cena, su tía Rocío - No son más que vulgares ladronzuelos, tentados por tu obvia ostentación de oro y piedras preciosas, que por cierto, son las más valiosas del mundo... Además, tienes muy poco sentido de lo que está de moda en nuestro círculo social...
-¿Moda? ¿Círculo social? ¡Tía Rocío, ¡esto es ridículo! ¡¡Se trata de gente capaz de matar!!
-¡Oh, tonterías! Has estado leyendo demasiadas novelas de suspenso, linda.
-Insistiré, hasta que entiendas que es peligroso.
-¡Más peligroso es que tú les des otro disgusto a tus padres! Por eso me quedaré aquí, para que no salgas esta noche, bajo ninguna excusa.
-¡No tienes derecho!
-¡Sí lo tengo! ¡Soy tu madrina!
-¡Pero, no mi madre! Además, mi padre te desheredaría si supiera que por tu exclusiva culpa, yo estoy a punto de perder a un excelente partido.
-¡No fantasees!
-No lo hago. Tengo una cita. ¡Discúlpame! - la joven, furiosa, se retiró de la mesa, y subió a su despacho – (“¡Ufff! ¡Qué fastidio!... Es bueno no haber aprendido nada de ella... ¡Parientes trepadores!... Toda una especie, más molesta que las moscas en verano... Programaré el Sweet Charity... y el helicóptero, para salir de aquí cuanto antes... Las llaves de emergencia... ¡Aquí están!... No me queda mucho tiempo... la maleta... Me cambiaré durante el vuelo... ¡Listo!”) – antes de que su molesta tía lo advirtiera, Clarisa subió al elevador, pasó por su habitación a buscar la ropa, y nuevamente en el ascensor, ejecutó su plan: colocó la llave en una pequeña cerradura bajo el tablero, que ocultaba otro panel de control, destinado al sótano, bajo el helipuerto privado, antiguamente, la base de operaciones de las Cazadoras de Vampiros funcionaba en ese lugar.
Se proveyó allí de las armas que utilizaría en caso necesario y finalmente ascendió a la pista. El aparato emprendió el vuelo.
Dentro de la casa, la tía Rocío veía cintas pornográficas, mientras su amante de turno se dedicaba a proporcionarle placer... ni siquiera escucharon el ruido del motor de la nave.
-(“¡Clarisa es asombrosamente puntual, no importa los medios que utilice para lograrlo!”) - sonríe el campeón de motonáutica, viendo cómo su bella novia cae a su lado luego de ejecutar un triple salto mortal desde la escotilla del helicóptero.
-Perdón por la demora, es que la tía Rocío está en casa.
-¡No hay cuidado, amor! Sólo fueron un par de minutos.
-¡Sabes que odio hacer esperar a la gente! ¡Especialmente a ti!
-¿Cómo te ha ido?
-Como lo suponía. Lo difícil viene ahora. Papá, no querrá creer que el enemigo es parte de su propia familia.
-¡¿Qué?!
-Tía Rocío... ¡Y su sentido de la moda!
-Ya lo imagino.
-¿Abordamos?
-¡Desde luego!
-«¡Rodéenlos! ¡Que no escapen!» - el Supremo, sentado en su trono, con Pamela entre sus piernas, da las órdenes para ejecutar a Clarisa esa misma noche - «¡No permitiré que sobreviva a otra salida del sol!... Eso es... ¡hermosa princesa!... Recupera tus fuerzas... Completa tu ritual de iniciación, será la única forma de no perder nuestra supremacía en la Tierra... ¡conóceme a fondo!... ¡Y tendrás todo el poder que tanto ambicionas!... ¡Sí!... ¡Hazlo!... ¡¡No le pongas límites a tu lujuria!!... ¡Hhhhh!... ¡Javier, súmate al acto, sin miedo!... ¡Penétrala!... Ahora debes beber su sangre, ¡y serás inmortal!» - el rito se completó.
-Todavía no he podido encontrar una pista firme para localizar a Pam, ni siquiera ha vuelto a atacarme para poder seguirle el rastro. - suspiraba Clarisa, reclinada sobre el pecho de Richie.
-Quería hablarte a cerca de eso, creo que tengo buenas noticias.
-¡Dime!
-Hay una relación estrecha entre las sectas satánicas, los vampiros, y las desapariciones de Obispos y sacerdotes...
-¡Peor de lo que soportó mi abuela! Es la primera vez en siglos que se alían.
-Hice una investigación exhaustiva a cerca de los miembros de los grupos, y en casi todos hay un punto en común: sus jefes han sido sacerdotes, religiosos, e incluso Obispos. Todos ellos, previamente desaparecidos o dados por muertos.
-¿Hay coincidencias de fechas?
-Significativas.
-¡Excelente avance!... ¡Hhhh!
-¿Estás bien?
-Sí. Ellos vendrán. Nos encontraron.
-Entonces, nos alejaremos de aquí.
-Vienen siguiéndonos.
-Eso veo.
-Saldré a ahuyentarlos. Dirígete a las cuevas subterráneas.
-¡Ya mismo! - Clarisa salió a cubierta, y extrajo la Teca.
-¡Malas noches, amigos! ¡¿Quién les dijo que podían interrumpir mi cita?!... ¡¿No saben que la gente tiene derecho a un descanso! ¡Muy bien, vayan aprendiéndolo ¡¡Descansen en paz!! - levantó la Hostia, y cientos de Nosferatus se desintegraron en el aire - ¡Tarea cumplida! - regresó junto a Richie.
-¿Todo en orden?
-¡En perfecto orden!
-¿Nos quedamos aquí?
-Me gusta la idea.
-¡Bien!
-¡Clarisita! ¡¿Por qué tardaste tanto?!
-Lo siento mamá, tuve que hablar con Fray Fernando, eso me demoró.
-¡Y, ¿todos esos instrumentos?!
-Decidí mimar un poco a los seminaristas.
-¿Otra vez?
-¡Otra vez!
-Van a salir más músicos que curas, al paso que van...
-Yo no lo veo así... ¿A qué hora se marchan?
-Antes de que anochezca.
-Ajá... Estaré era la máquina, buscando algunos datos.
-De acuerdo, no te molestaré. - Clarisa subió serenamente las escaleras, e ingresó a su habitación.
-(“No hacía Comunión con ella, desde el último retiro que compartimos... Tengo que saber por qué se debilitó así... Aunque también es preocupante la cantidad de seminaristas que siguen desapareciendo sin dejar rastros... veamos... tal vez las leyendas den alguna pista... la Biblioteca de Rumania... «Los que nunca fueron derrotados llegaron a la categoría Suprema»... «Se díce que fueron sacerdotes, Obispos o seminaristas seducidos por vampiresas con un entrenamiento especial, a lo que sumaban espías que se infiltraban en el entorno de la víctima escogida»... Una versión más sofisticada, de la forma en que atraparon a Javier... «Mujeres de extrema belleza, cálidas y misteriosas, audaces y atrevidas, estudian cada punto débil del futuro nosferatus, minan sus sistemas de defensa, llevándolos a profundas crisis de fe»... Evidentemente, eso les lleva tiempo... «Una vez sembrada la duda, comienza la seducción indirecta, a través de violentas pesadillas eróticas»... Una combinación explosiva... «Las víctimas, por lo general, no saben a quién recurrir, omiten confesar sus deseos malsanos, y es allí donde caen por completo sus defensas»... Por eso hay cada vez menos curas, y más vampiros... Quizás, la clave para encontrar su escondite sea esa... vigilaré los conventos y seminarios para detectar a los espías, y así desbaratar la organización... Y también podré encontrar a Pam... Javier también fue capturado, ya debe estar muerto... pudo haberse evitado... pero no imaginé lo de Pam... Verificaré los domicilios de cada sede en la que haya habido desapariciones... Bien... hay mucho trabajo por delante, son más de cien en todo el país... pero la distancia, no es un problema grave... ¡Hhhh!... ¡Estoy cansada!... No me vendría mal una llamada de Richie...”) - sonó el celular - ¿Hola?
-¡Amor, ¿cómo estás?!
-¡Maravillosamente, ahora que te escucho!
-¡Se agradece el cumplido, muñeca!
-Por nada.
-¿Tienes algún plan?
-Pues... No... aunque, parece que Ronromeo quiere dar un paseo...
-Bueno, lo llevaremos con nosotros, ¿nos encontramos en el acantilado a medianoche?
-Bien, seré puntual, el Sweet Charity nos estará esperando.
-¡Excelente!
-¿Has notado algún cambio entre la gente que te rodea?
-No. ¿Por qué preguntas? ¿Estás celosa?
-No exactamente, sólo intento ser previsora.
-¿Presentimientos?
-Efectivamente. Estuve haciendo algunas investigaciones en la red... Cuídate de los estudiantes nuevos en la Universidad, profesores, celadoras, en fin, cualquier persona que no conozcas. Sobre todo, si son mujeres.
-(“¡Esto ya fastidia!”)Lo tendré en cuenta, preciosa.
-Mis padres vuelven a marcharse esta noche.
-¡Qué bien!
-Estaré sola dos meses, eso me facilitará las cacerías de vampiros...
-¿Ellos no corren peligro?
-Papá sabe como cuidarse, fue hijo de una Cazadora...
-¡Vaya! ¡Cada día se aprende algo nuevo!
-Cierto... ¿Tuviste encontronazos con la prensa?
-No, desde lo del gimnasio.
-Pronto veré la nota en las revistas...
-¿Sucede algo?
-Creo que tengo compañía... Papparazzis... están trepando por las enredaderas del jardín... Te llamaré más tarde.
-De acuerdo.
-Adiós. - Clarisa colgó y tomó un cepillo - (“Menos mal que mi padre, instaló un dispositivo en el teléfono para evitar que lo pinchen... Después de todo, tienen que ganarse el pan, así que, me asomaré a cepillarme el pelo y saludaré amablemente... será divertido y me evitaré una fama de hostil con los medios gráficos...”) - la muchacha hizo lo que tenía pensado: subió el volumen del parlante del portero visor - ¡Hola!... Cuidado, allí hay una piedra floja, se pueden caer... Por nada... (“Bueno, ya es suficiente... continuaré con mi entrenamiento en el sótano...”) ¡Ronromeo!... ¡ven acá, gatito!... ¿Quieres corregir mi rutina?
-«¡Miau!»
-¿Eso quiere decir «Sí»?
-«¡Miaurr!»
-¡De acuerdo! - tomó a su mascota, y bajó por el ascensor - Aquí estamos... Esta es mi bolsa de entrenamiento... y este, mi muñeco... Parece que no te gusta.
-«¡Grr!... ¡Fffffff!»
-¡Calma!... Quédate en las colchonetas... eso es...
-«¡Miaurrr!»
-Bien... Tú me corriges, ¿O. K.?
-«¡Prr! ¡Miau!» - el gatito clavó sus ojos azules en la silueta perfecta de su ama, que inició el calentamiento. Al cabo de treinta minutos, Clarisa se dispuso a elongar, cerca de su vigilante mascota...
-¡Ay!... Duele un poco...
-«¡Miau!»
-Sí, claro, continuaré...
-«¡Prrrrrrrrrr! ¡Prrrrrrr! ¡Prrrrrrrr!»
-¡Gracias! - el gato se acercó a la joven para jugar con su cinta negra.
-«¡Grrrrrrr! ¡Grrrrrrrrr!»
-¡Muy bien! Tú te diviertes y yo sufro... Suficiente, mi rutina no termina... contraer... ¡y comenzar a patear!... ¡Uno!... ¡Uno, dos!... ¡Uno, dos, tres!... ¡Hhh!... ¿Qué tal estuvo esa combinación?
-«¡Miu!»
-¡¿No te gustó?!
-«¡Mi!»
-Reconozco que caí algo desviada, en fin, lo intentaré de nuevo... ¡Uno!... ¡Uno, dos!.. ¡Uno, dos, tres!...
-«¡Prrrrrrrrr! ¡Miau!»
-¡Gracias!... intentaré algo más difícil... patada... salto con giro... y patada circular...
-«¡Miau!»
-¡Aquí voy!... ¡Uno!... ¡Dos, tres!
-«¡Prrrrrrrrrr! ¡Miaurrrrrrr!»
-¡¿Te gustó más que la anterior?!
-«¡Prrrrrrrrrr!»
-¡Ya veo!... - Clarisa continuó con su entrenamiento dos horas más, esta vez, con formas para danes - ¿Estuvo bien?
-«¡Miu!»
-¿No?
-«¡Mi!»
-¡Oye, sólo fueron un par de centímetros!
-«¡Pfffffff!»
-¡Está bien!... Lo haré otra vez... ¡Vaya que eres exigente! – repitió la misma forma siete veces, hasta que Ronromeo estuvo satisfecho.
-«¡Prrrrrrrr! ¡Prrrrrrrrrr! ¡Miaurrrrrrr!»
-¡Por fin!... ¡Estoy muerta!
-«¡Prrrrrrrr! ¡Prrrrrrrrrr! ¡Miaurrrrrrr!»
-¡Necesitaré un buen baño!... ¡Estoy empapada!
-«¡Prrrrrrrrrr! ¡Prrrrrrrrrrrrr! ¡Prrrrrrrrrr!»
-¿Quieres mimos?
-«¡Prrrrrrrr! ¡Prrrrr!» - la niña se dejó caer en el Tatami y jugó unos minutos con su mascota, seguidamente, regresó a su cuarto a preparar su baño y su vestuario.
-¡Hhhh!... Bien... ¡No veas! ¡Eres macho! - le arrojó al gatito una toalla en la cabeza que, obviamente, lo cubrió por completo - ¡Te ves gracioso!
-«¡Miau! Miau! ¡Miau!»
-¡Ya, ya! ¡No es para tanto! (“¡Eres decididamente fuera de lo común!... me criticas el entrenamiento, más que mi propio Sabón Nin... ¡Pero no dejas de ser un hermoso gatito Siamés!... Por otro lado, me inquieta la situación de Richie... Está algo indefenso... El Supremo ya debe saber que él es mi punto más vulnerable... Deberé confiar más en la influencia de los lazos afectivos que me unen a él... y a Pamela...”) - terminó de bañarse, y se cercioró de que no la estuvieran espiando, tomó el celular y marcó el número de Ricardo.
-¿Hola?
-¿Richie?
-¡Preciosa, por fin! ¡Creí que no llamarías!
-Nos interrumpieron, era justo que termináramos nuestra charla.
-Tienes razón... ¿Qué estás haciendo?
-Acabo de bañarme.
-¿Estás en bata?
-No. Con la toalla puesta.
-¡Muy interesante!
-¿Tú crees?
-¡Por supuesto!
-¡Gracias!
-Por nada... ¡Es una pena perderme semejante espectáculo!
-¡Exageras!
-Claro que no... ¡Muero por verte desnuda!
-¡Ya! ¡Suficiente!
-¡Me encantas!... Eres preciosa... De pies a cabeza... No puedo actuar como un hipócrita al respecto... ¡Te amo!
-¡Ya lo sé!
-¡Y te deseo también, preciosa, de veras!
-Richie... estás pareciéndote a alguien que no quiero recordar...
-¡Lo siento! No quise herirte, pero tenía que decírtelo.
-¡Te comprendo!... Eres humano...
-No se te oye bien, ¿qué te sucede?
-Algo no está bien, y quiero averiguar qué es... No me dices todo lo que sabes.
-Estuve hablando con Javier hace un rato. Me dijo muchas cosas a cerca de ti... (“¡A ver, ¿qué respondes ahora?!”)
-Richie... Javier está muerto.
-¡No puede ser!
-Es uno de ellos, ¡tenemos que encontrarlo! ¡Dime dónde lo viste!
-Fui a visitarlo a su departamento... (“Le diré la verdad, no podrá seguir mintiendo.”)
-¡Fuiste a caer en la boca del lobo! La situación es peor de lo que imaginé... No te acerques a él de nuevo, ya estás demasiado expuesto, no quiero que corras ningún riesgo, ¿de acuerdo?
-Está bien.
-¡Por favor cuídate! ¡Me importas demasiado! Ya perdí a mi mejor amiga, ¡no permitiré que a ti te suceda lo mismo!
-¡Ni lo menciones!... ¿Podemos vernos ahora?
-Si vienes para casa, no hay problema.
-¿Por dónde ingreso?
-Flor la calle de atrás. No tienes más que seguir las rosas.
-¡Cierto! ¿En una hora?
-¡En una hora!
-¡Bien! Ádiós.
-Adiós. - el muchacho cerró su teléfono celular y salió rumbo a la casa de Clarisa.
–(“¿Javier, muerto? ¿Vampirizado?... ¡Pamela! Sólo así puede explicarse... hasta el momento, no he querido creerle a Clarisa, pero esto me supera...”)
-Richie, ¿adónde vas? - preguntó la madre.
-A ver a Clarisa.
-Ten cuidado, los periodistas están por todas partes.
-Lo tendré... – besó a su madre, y subió a su coche – (“Aunque ahora que lo pienso, se veía extraño... llevaba gafas de sol... y todas las ventanas de su departamento estaban cerradas... no se enfadó cuando hablamos de Clarisa, mas bien diría que quería ayudarme a conquistarla... No parecía él mismo, su dormitorio estaba desordenado... se sorprendió al verme... cualquiera diría que no estaba listo para recibirme...”) - condujo a través de la ciudad, sin que nadie lo siguiera - (“Será conveniente que le cuente cada detalle a Clarisa, tal vez le sirva de ayuda... las rosas... debo seguir las rosas... ya estoy llegando... ¡Y Clarisa, aguardándome!... ¡Allí está!... De blanco, ¡como un ángel!”) - bajó de su vehículo, y corrió al encuentro de la bella Cazadora.
-¡Richie! - la abrazó con ternura, y la besó apasionadamente.
-Tenemos que hablar...
-Lo imagino... Ven, vamos a mi dormitorio, Está el Santísimo Expuesto, eso te ayudará a decir la verdad.
-De acuerdo. - lentamente, subieron las escaleras, y llegaron al lugar indicado.
-Bien. Te escucho. ¿Fuiste a ver a Javier?
-Se veía extraño... (“No puede engañarme ante algo tan sagrado...”)
-¿Qué tan extraño?
-Cansado... Ojeroso... Llevaba gafas de sol... y las ventanas cerradas en su habitación fueron lo que más me llamó la atención.
-Muy extraño... pero son síntomas corrientes... ¿de qué hablaron?
-De ti.
-¿De mí?
-Mucho... hizo muchas preguntas, y me dio muchas respuestas.
-¿De qué tipo?
-Sobre tus actividades... Artes marciales... Parecía conocerte más de lo que yo supuse.
-Sólo Pam pudo decirle tantas cosas...
-¿Hasta qué punto no influyen tus celos en todo esto? Pamela está bien, y con él.
-Richie... ¿No crees nada de lo que te conté?
-No te he visto matar vampiros... porque los vampiros no existen...
-Estás en un error... no tengo celos de Pamela, ella ya no es humana, tienes que creerme... Ya has visto muchas cosas que exceden todo razonamiento coherente... ¿qué otras cosas te dijo él?
-Me habló de una marca, debajo de tu pecho izquierdo.
-La Cruz... Es de nacimiento, según los escritos que leí de la página privada del Vaticano, me identifica como cazadora. Pam se lo dijo, sólo ella la vio desde que éramos pequeñas y nos bañábamos juntas...
-¿Segura?
-Segura. Nunca estuve con él, para poder cazar vampiros debo ser virgen.
-Decía que tienes un cuerpo perfecto, como una escultura.
-Me lo dijo muchas veces, por eso quiso que yo fuera su modelo, me negué.
-Su tono de voz era muy distinto, oscuro, como con un eco...
-Es un vampiro. Pero por lo que me cuentas, aún no está listo para salir a matar... No te atacó en ningún momento, ¿verdad?
-No... Se... sorprendió al verme, no sabía qué decirme al principio.
-Tu propio sentido de la justicia te llevó a adelantarte a los planes del enemigo.
-¿Qué piensas hacer?
-¡Lo que tenga que hacer!
-¡Es peligroso! ¡No lo hagas!
-No pueden dañarme, ni ellos, ni la policía. Sólo lo darán por desaparecido, además, no iré armada, ¡sabes que no me hace falta! Estaré bien, lo prometo.
-Clarisa... ¿Soy parte del plan para destruirte?
-Lamentablemente... sí.
-¡Dios! - el muchacho abrazó a Clarisa con fuerza. Temblaba... y lloraba con justas razones.
-Vamos a luchar juntos en esto... No hay que dejar a la vista la más mínima debilidad.
-¿Qué puedo hacer?
-Tengo una idea... - se acercó al oratorio, y de allí tomó una cajita dorada - Llévate esto, y no te separes de él, por nada del mundo. Es un rosario hecho con pétalos de rosas de Castilla, por el momento, servirá para que estés protegido. Cuando elimine a Javier, estarás casi fuera de peligro y yo estaré más cerca de Pam, y de la solución a todo este embrollo.
-«¡¿Cómo que estuvo contigo?!»
-«¡Me sorprendió, Mi Señora! ¡No creí que se atreviera!»
-«¡Imbécil! Ahora, tendré que enviarte una legión, y arriesgarla inútilmente... No estás preparado para salir al exterior, y yo he sido debilitada por el arma secreta de la Cazadora... Él es una espada de doble filo... vampirizarlo, requerirá de todas nuestras estrategias... Ahora vete... y procura que nadie se entere de tu paradero... aún tienes la ventaja del odio que generaste en la Cazadora, no querrá volver a verte por algún tiempo...»
-«Obedeceré, Mi Princesa.» - Javier se retiró de la presencia de Pam. Ella, encerrada en su cripta, se debatía entre confusos pensamientos y pesadillas recurrentes.
-(“«¡Me mordió!... ¡¡Me mordió el perro, mamá!!... ¿Cómo te llamas?... ¿Me llevarás con un doctor?... Clarisa, ¡mi mejor amiga!... Pasaremos la prueba de canto, ¡¡ya verás!!... ¡Oh, no digas eso! ¡Las dos tenemos el mismo talento!... ¡Javier es guapísimo, ¡dile que sí!!... ¡Ella no lo merece!... ¡¿Por qué no se fijó en mí?!... Apenas y deja que la bese... Se cree mejor que yo... ¡La destruiré y me quedaré con Javi!... ¡No quiero delatarla, ¡la matarán!!... pero ella me odia...»”)
-Realmente, Pamela te odia, ¡y fue tu mejor amiga!
-¡Qué contrasentido, ¿verdad?!... Es... parecido a un lavado de cerebro... como un proceso vertiginoso de reconversión de ideas... odian todo lo que amaron en su vida... Sacan a relucir todas sus frustraciones... hacen todo lo que no hubieran hecho jamás estando vivos... ¡imagina lo que pueden hacerle a un sacerdote!
-Tu peor pesadilla, ¿o me equivoco?
-¡¡No te equivocas!!... ¡Por Dios, mira la hora qué es!... ¡Tengo que ir a despedirme de mis padres! ¿Te quedas con Ronromeo unos minutos?
-¡Claro! No tardes.
-¡Descuida! - Clarisa le arrojó a Richie, un almohadón en la cabeza, antes de cerrar la puerta.
-¡Muy graciosa! ¡Muy graciosa!
-¡Jí, jí! - se escuchó detrás de la pared. La millonaria heredera bajó las escaleras, y se arregló el cabello frente al espejo del pasillo, pero... - ¡Hhhh! (“¡Oh, no!... ¡Están aquí!... ¡No son principiantes!... volver a subir, sería perder demasiado tiempo... Bien, en ese caso, lo mejor es una acción rápida y terminante...”) - se quitó los zapatos y se abalanzó sobre los vampiros, que casi atacan a sus padres...
-¡Ronromeo, ¿qué sucede?!
-«¡Grrrrrrrrr! ¡Pfffff!»- el pequeño gato saltó de entre los brazos de Richie, para enganchar su cuello en la correa de la Teca y saltar por la ventana...
-¡Dios bendiga a los gatos siameses! - exclamó Clarisa, al tiempo que aplicaba un fuerte puñetazo en el estómago de su rival. Ronromeo se le acercó y saltó sobre la cara del vampiro, transformándose en un león blanco. - ¡Wow! - los no vivientes huyeron despavoridos - ¡Ronromeo... ¿eres tú?! - la niña, más que sorprendida, se acercó al animal y lo acarició, mientras él le lamía la cara - ¡Hey! ¡Vas a poner celoso a Richie! - susurró, mirando de reojo a sus padres, que se reponían del susto; rápidamente puesta en pie, preguntó - ¿Están bien los dos?
-Sí, hijita, gracias... ¡Estuviste increíble!
-Viniendo de ti, ¡es un verdadero halago, papá! - lo abrazó.
-¡Oigan, yo también quiero de eso!
-¡Celosa! - exclamaron los dos, entre risas.
-¡Cuídate!
-¡Lo haré! ¡Adiós! - saludó finalmente. El avión particular, despegó por segunda vez hacia el Caribe - (“¡Ahí, van!... ¡Cielos!... Ronromeo... ¡Gatito lindo, eres todavía más especial, de lo que ni yo misma hubiese llegado a sospechar!... Ven acá... te cambiaré el nombre cuando te transformes: te llamaré Ariel, que significa «El León de Dios»...”) ¡Gracias, me salvaste la vida!... Ya volviste a ser tú...
-«¡Prrrrrrrrrrr! ¡Miau!»
-Trajiste la Teca en cuanto percibiste peligro... ¡Eres mi héroe!
-«¡Prrrrrrrr! ¡Prrrrrrrrrrr! ¡Prrrrrrrrrr! ¡Miaurrrrr!»
-Regresemos con Richie, debe estar preocupado.
-«¡Inútiles! ¡¡Pusilámines!! ¡¡Su ineptitud sobrepasa en mucho el límite de lo tolerable!!!... ¡¡Centinelas!!»
-«¡Señor!»
-«¡¡Llévenselos a la torre más alta del castillo!!» - los centinelas acataron la orden. Los vampiros que sobrevivieron a la cacería acababan de ser condenados a muerte...
-¿Todo está bien, preciosa?
-Comienzan a desesperarse... se puede decir, que están viniendo a buscarme... el entrenamiento es bueno, pero ellos ahora son más fuertes.
-¡Tienes a Ronromeo, ¿qué puede sucederte?!
-¡Es verdad!
-Ven, vamos a descansar un poco... Supe que Jordi se recupera en un convento.
-Sí, con los jesuitas.
-Me enteré de que su padre era uno de los invitados a la fiesta...
-Lo que indica que, por el momento, mis padres no sospechan nada.
-Pero... Jordi está enamorado de ti, ¿verdad?
-No.
-Las versiones corren...
-Sin fundamento.
-Te vieron con él...
-¡¿Vas a pasar una noche de insomnio, sólo porque me tomó de las manos en la Catedral?!
-¡¿Eso fue todo?!
-¡Eso fue todo!
-Además... a Jordi dejaron de interesarle las chicas.
-No comprendo.
-Le gustan, pero ya no le interesan... Quien verdaderamente le importa es Cristo... ¡Va a ser sacerdote!
-¡Cielos!... ¡Me dejas sin habla!
-El Obispo reaccionó igual. No es fácil que se den ese tipo de conversiones después de un exorcismo.
-Parece de película.
-Sólo que no he visto ninguna, en la que se haga el Ritual en la forma correcta.
-¿Te dedicarás a eso cuando derrotes a los vampiros?
-No lo he pensado. Puedo tardar años en vencerlos definitivamente...
-Al paso que vas, yo no diría eso.
-¡Gracias!
-¿Cómo quedó el arreglo del dormitorio de tu otra casa?
-Aún no está listo... Creo que tienen por delante varios días de trabajo... Pero podemos verlo desde aquí, si quieres... Encenderé el ordenador... Y enviaré un e- mail a la estación de policía, con la orden para que el circuito cerrado de TV, sea conectado a la red... ¡Ya!... vamos a hacer primero un recorrido por los exteriores... ¡Por Dios!... ¡Mira eso!... ¿Qué se supone que intentan hacer?
-Entierran algo.
-No son mis jardineros habituales... Tampoco son vampiros...
-¿Sospechas?
-Sí... El cementerio... ¿Alguna vez has visto una profanación de tumbas?
-No.
-Héla aquí... ¡En vivo y en directo!... Llamaré a Fray Fernando. - Clarisa, decidida, tomó el celular - ¿Hola?
-¡Clarisa, ¿cómo estás, hija?!
-Preocupada.
-¿Qué sucede?
-Hay una secta satánica en Mallorca.
-¿Cómo lo supiste?
-Me localizaron.
-¡Voy para allá!
-Estoy en Santa Clara de Asís.
-Bien.
-Nos vemos... Ya viene hacia aquí. - Clarisa se sentó sobre los almohadones, con la cara entre las manos - ¿De dónde habrán aparecido?
-Se han puesto de moda...
-Entonces, estarán en todos lados... ¡Hay mucho trabajo, y muy duro!... Volveré al ordenador...
-Aprovechan la ausencia de tus padres.
-Evidentemente... No pueden acercarse a mi cuarto... no lo encuentran... pero... tengo algo preparado, por si lo hacen.
-¿Qué es?
-¡Una trampa para ratas, tamaño gigante!
-¡¿Cómo?!
-Funciona de manera sencilla... Los deja entrar, pero no pueden salir.
-Con una puerta que sólo se abre por fuera...
-Algo así... Cuando todos estén dentro, automáticamente, haré sonar las alarmas.
-Pero, ¿de qué los acusarás?
-La Custodia es de oro y piedras preciosas, como los candelabros, la araña y las antorchas. A cualquiera se le despertaría la codicia, ¿no te parece?
-Supongo que sí.
-Bien... ¡Oh, vaya! ¡Comenzó la cacería!
-«¡Que comience de inmediato la búsqueda intensiva de la Cazadora!» - ordenó el Supremo - «¡La quiero viva! ¡No lo olviden! ¡La haré pedazos!... Su abuela no pudo contra nosotros... La venceremos del mismo modo, aislándola de todo aquello que ama, haciéndola sentirse sola, abandonada por su familia... ¡Y por su Dios!...»
-Tu padre, ¿te contó más a cerca de tu abuela?
-No demasiado. Sólo se limitó a decirme que sus poderes se comenzaron a debilitar cuando él nació... Jamás se supo por qué la maternidad afectó su misión, cuando por lógica, debió fortalecerla y completarla... hasta hoy.
-Tal vez este antiguo manuscrito, aclare tus dudas, Clarisa... - el anciano fraile acababa de ingresar al cuarto.
-¡Fray Fernando! - la niña lo abrazó.
-¡Pequeña!
-Ven, te presento a...
-Ya nos conocemos, Clarisa. - sonrió Richie - Fray Fernando Ridruejo es el confesor de mi abuelo.
-¡Oh, vaya! ¡Dios no da puntada, sin hilo!
-Nunca mejor dicho hija, ten...
-Son antiquísimos restos de pergamino... Están escritos en latín... griego... y castellano antiguo... con algunas frases en latín germánico... Llevará tiempo traducirlo... pero podemos escanearlo, para conservar mejor la información... ¡Un momento!... Hay más idiomas aquí... ¡Esto es increíble!... Son... ¡manuscritos!... ¡Dios mío!... ¡Estos documentos son incunables!... ¡¡Son parte de los antiguos rollos perdidos del Mar Muerto!! ¡Fray Fernando, ¿cómo...?!
-¡Menos pregunta Dios, y perdona!... ¿Qué hay de la secta?
-Está infiltrada en toda la ciudad... ¿Cuántas profanaciones de tumbas han habido en los últimos años?
-Algunas, pero todos los profanadores están ya en prisión.
-Mira esto...
-¡Dios Santo!
-Ritos afrocubanos y afrobrasileños...
-Esto no lo esperábamos... Tendremos muchos factores en contra.
-Cierto. La Iglesia no los considera una amenaza.
-Pero lo son.
-¿Qué podemos hacer?
-Intentaré algo. Tengo una idea.
-¡Cuéntanos, Richie!
-Graba todo lo que registren las cámaras, montaremos un estudio de televisión, en donde nadie pueda interrumpirnos...
-¡El sótano! - exclamó Clarisa - Si quitamos los aparatos de gimnasia, será lo suficientemente espacioso para nuestro propósito.
-¡Estupendo! - suspiró el fraile. Clarisa tecleó una clave en su máquina.
-Con eso basta...
-Clarisa.
-¿Fray Fernando?
-¿Crees que su blanco será el Santísimo?
-Es lo más probable...
-¿Alguna idea?
-Todo está resuelto. Podrás dormir tranquilo... Ya está... ¿Nos ponernos en camino a la ciudad? Para cuando lleguemos, la policía rodeará la casa.
-Bien. Clarisa, te veré a medianoche.
-¡No lo olvidaré! - un beso discreto, y la pareja se separó momentáneamente.
-Cada día me sorprendes más, pequeña.
-Me halagas, Fray Fernando.
-¿Cómo los atrapaste?
-Con un buen sistema de alarma... las cámaras registran los rostros desconocidos, y eso hace que la primera señal ponga sobre aviso a los perros, luego en mi dormitorio, la ratonera: al levantar la Custodia se traba automáticamente la puerta de acceso... el resto es fácil de deducir.
-¡Magnífico!
-¡¿Ves lo que te digo?!... Patrullas y camiones celulares... ¡Además de periodistas, claro!... ¡Hhhh! Ingresemos por la entrada del personal doméstico. – Clarisa, al volante de su Lamborghini, llegó a la casa de sus padres - Con permiso...
-¡Niña Clarisa! ¡Nadie sabe qué sucede! ¡Las alarmas se han vuelto locas! – exclamó el mayordomo.
-¡Calma, Sergi! Todo estará bien.
-¡Hay gente del servicio, encerrada en su dormitorio!
-Ya lo sé... a propósito, ¿quién los contrató?
-Su señor padre puso un aviso en el periódico y el jefe de personal hizo el resto...
-Envíalo a mi despacho, en cuanto se vaya la policía.
-Hay un pequeño inconveniente...
-¿Cuál?
-Él también quedó atrapado en su alcoba, mi niña.
-¡Cielos! (“¡Sabía yo, que este tío nos traería problemas!”)
-¿Repararán las alarmas?
-No están descompuestas... funcionaron en forma inmejorable... ¿Oficial?
-Señorita Suárez... Por favor, ¿me permite las llaves de su cuarto?
-Sí, claro, aquí están... Pero sólo yo puedo utilizarlas, el sistema se activa, si no reconoce mis huellas dactilares... ¡Vaya, vaya, vaya!... Señor Vilallonga, ¡qué gusto volver a verlo!... ¡Profanando el Santísimo Sacramento! ¡Y no precisamente por la Custodia de oro! ¡Usted y su secta diabólica burlaron la buena fe de mi padre, ¡pero no van a engañarme a mí!!
-¡No sé de qué habla! ¡Soy inocente!
-Las cámaras del circuito cerrado de TV probarán lo contrario. Todo está registrado... Pueden llevárselo, oficiales... mis valores están en su lugar, excepto el principal... La Hostia Consagrada que está escondida en la ropa interior del sospechoso... Fray Fernando tenga la amabilidad de registrarlo. - el fraile procedió.
-¡Aquí está, Clarisa!
-¡Lo sabía!... Bien, ahora sí pueden sacar de mi cuarto a esta lacra...
-Jamás imaginé que se atreverían a tanto.
-Es que los errores y los descuidos humanos, en cualquier circunstancia, se pagan caro, Fray Fernando.
-Lo sé... Voy a bendecir nuevamente la casa, eso reforzará las defensas.
-Bien pensado...
-(“A ver... Debo tener algún libro al respecto... Videos... Programas de televisión, tal vez allí puedan facilitarme el material que busco.”) - Richie, dispuesto a todo para ayudar a Clarisa, pasa su tiempo libre trabajando en su propio documental sobre sectas satánicas; bien pronto descubre que la situación es más crítica de lo que aparenta - (“Clarisa, una vez más, tenía razón... están en todas partes... Se lo toma como un entretenimiento de moda... Nadie se da cuenta del todo, de que juegan con la muerte de sus propias almas... Encontré algo... «Los efectos más visibles en la detección de este tipo de grupos pseudorreligiosos, son: cambios repentinos en la personalidad, depresión, autoritarismo, agresividad, miedo a los objetos religiosos, fobia a las iglesias...» ¡Dios mío!... ¡Eso es!... Clarisa llegó a insinuarlo... «hacen todo lo que jamás harían estando vivos... ¡imagina lo que podrían hacerle a un sacerdote!»... ¡Transformarlo en líder de una secta satánica!... Saldré de dudas, en un momento... todo es cuestión de indagar en la red, a qué se dedicaban estos pillos antes de ser lo que son...”) - en pocos segundos, sus sospechas se cristalizaron - (“¡Cielos!... Más del ochenta por ciento, fueron sacerdotes y religiosos!... «Los que fueron Obispos, realizan incluso sacrificios humanos, en sangrientos rituales»... ¡Vampiros!... Nada está fuera de contexto, todo guarda una perfecta relación... Eso puede ser una pista firme, para hallar a Pamela, fuera del alcance de Javier... Se lo diré a Clarisa...”) - miró el reloj - (“Ya es hora de que me cambie para ir a verla...”)
-En mi opinión, Clarisita, fuiste demasiado dura con esa gente. - comentaba durante la cena, su tía Rocío - No son más que vulgares ladronzuelos, tentados por tu obvia ostentación de oro y piedras preciosas, que por cierto, son las más valiosas del mundo... Además, tienes muy poco sentido de lo que está de moda en nuestro círculo social...
-¿Moda? ¿Círculo social? ¡Tía Rocío, ¡esto es ridículo! ¡¡Se trata de gente capaz de matar!!
-¡Oh, tonterías! Has estado leyendo demasiadas novelas de suspenso, linda.
-Insistiré, hasta que entiendas que es peligroso.
-¡Más peligroso es que tú les des otro disgusto a tus padres! Por eso me quedaré aquí, para que no salgas esta noche, bajo ninguna excusa.
-¡No tienes derecho!
-¡Sí lo tengo! ¡Soy tu madrina!
-¡Pero, no mi madre! Además, mi padre te desheredaría si supiera que por tu exclusiva culpa, yo estoy a punto de perder a un excelente partido.
-¡No fantasees!
-No lo hago. Tengo una cita. ¡Discúlpame! - la joven, furiosa, se retiró de la mesa, y subió a su despacho – (“¡Ufff! ¡Qué fastidio!... Es bueno no haber aprendido nada de ella... ¡Parientes trepadores!... Toda una especie, más molesta que las moscas en verano... Programaré el Sweet Charity... y el helicóptero, para salir de aquí cuanto antes... Las llaves de emergencia... ¡Aquí están!... No me queda mucho tiempo... la maleta... Me cambiaré durante el vuelo... ¡Listo!”) – antes de que su molesta tía lo advirtiera, Clarisa subió al elevador, pasó por su habitación a buscar la ropa, y nuevamente en el ascensor, ejecutó su plan: colocó la llave en una pequeña cerradura bajo el tablero, que ocultaba otro panel de control, destinado al sótano, bajo el helipuerto privado, antiguamente, la base de operaciones de las Cazadoras de Vampiros funcionaba en ese lugar.
Se proveyó allí de las armas que utilizaría en caso necesario y finalmente ascendió a la pista. El aparato emprendió el vuelo.
Dentro de la casa, la tía Rocío veía cintas pornográficas, mientras su amante de turno se dedicaba a proporcionarle placer... ni siquiera escucharon el ruido del motor de la nave.
-(“¡Clarisa es asombrosamente puntual, no importa los medios que utilice para lograrlo!”) - sonríe el campeón de motonáutica, viendo cómo su bella novia cae a su lado luego de ejecutar un triple salto mortal desde la escotilla del helicóptero.
-Perdón por la demora, es que la tía Rocío está en casa.
-¡No hay cuidado, amor! Sólo fueron un par de minutos.
-¡Sabes que odio hacer esperar a la gente! ¡Especialmente a ti!
-¿Cómo te ha ido?
-Como lo suponía. Lo difícil viene ahora. Papá, no querrá creer que el enemigo es parte de su propia familia.
-¡¿Qué?!
-Tía Rocío... ¡Y su sentido de la moda!
-Ya lo imagino.
-¿Abordamos?
-¡Desde luego!
-«¡Rodéenlos! ¡Que no escapen!» - el Supremo, sentado en su trono, con Pamela entre sus piernas, da las órdenes para ejecutar a Clarisa esa misma noche - «¡No permitiré que sobreviva a otra salida del sol!... Eso es... ¡hermosa princesa!... Recupera tus fuerzas... Completa tu ritual de iniciación, será la única forma de no perder nuestra supremacía en la Tierra... ¡conóceme a fondo!... ¡Y tendrás todo el poder que tanto ambicionas!... ¡Sí!... ¡Hazlo!... ¡¡No le pongas límites a tu lujuria!!... ¡Hhhhh!... ¡Javier, súmate al acto, sin miedo!... ¡Penétrala!... Ahora debes beber su sangre, ¡y serás inmortal!» - el rito se completó.
-Todavía no he podido encontrar una pista firme para localizar a Pam, ni siquiera ha vuelto a atacarme para poder seguirle el rastro. - suspiraba Clarisa, reclinada sobre el pecho de Richie.
-Quería hablarte a cerca de eso, creo que tengo buenas noticias.
-¡Dime!
-Hay una relación estrecha entre las sectas satánicas, los vampiros, y las desapariciones de Obispos y sacerdotes...
-¡Peor de lo que soportó mi abuela! Es la primera vez en siglos que se alían.
-Hice una investigación exhaustiva a cerca de los miembros de los grupos, y en casi todos hay un punto en común: sus jefes han sido sacerdotes, religiosos, e incluso Obispos. Todos ellos, previamente desaparecidos o dados por muertos.
-¿Hay coincidencias de fechas?
-Significativas.
-¡Excelente avance!... ¡Hhhh!
-¿Estás bien?
-Sí. Ellos vendrán. Nos encontraron.
-Entonces, nos alejaremos de aquí.
-Vienen siguiéndonos.
-Eso veo.
-Saldré a ahuyentarlos. Dirígete a las cuevas subterráneas.
-¡Ya mismo! - Clarisa salió a cubierta, y extrajo la Teca.
-¡Malas noches, amigos! ¡¿Quién les dijo que podían interrumpir mi cita?!... ¡¿No saben que la gente tiene derecho a un descanso! ¡Muy bien, vayan aprendiéndolo ¡¡Descansen en paz!! - levantó la Hostia, y cientos de Nosferatus se desintegraron en el aire - ¡Tarea cumplida! - regresó junto a Richie.
-¿Todo en orden?
-¡En perfecto orden!
-¿Nos quedamos aquí?
-Me gusta la idea.
-¡Bien!
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